MANAGUA – NICARAGUA / En una noche cargada de emoción y orgullo cultural, el Teatro Nacional Rubén Darío fue escenario de la conmemoración del 40 aniversario del Ballet Folclórico Quetzalnáhuatl, dirigido por el maestro William Herrera, figura clave en la promoción y preservación de la danza tradicional nicaragüense.
Desde su origen en la Escuela Normal Alesio Blandón, el ballet ha dedicado cuatro décadas a fortalecer la identidad nacional mediante la enseñanza y difusión del folclore, labor que ha impactado a miles de niños y jóvenes. “La mayor satisfacción es enseñar nuestras danzas y tradiciones, fortalecer el amor a la patria”, expresó Herrera, resaltando la vocación educativa del grupo.
Más de 200 artistas en escena, entre niños, adolescentes y adultos, ofrecieron un espectáculo fruto de meses de intensa preparación, que incluyó ensayos coreográficos, coordinación musical y diseño escénico. La velada presentó cuadros de danzas indígenas, afrocaribeñas y mestizas, en un despliegue visual y sonoro que cautivó al público.
IDENTIDAD NICARAGÜENSE
La celebración contó con el respaldo de diversas instituciones. Pablo Castillo, de la Alcaldía de Managua, destacó el papel del ballet en la ciudad creativa, mientras que Aarón Peralta, director de Canal 6, elogió su “trayectoria fructífera en favor de la identidad nacional”.
También estuvieron presentes el diputado Edwin Castro, quien reconoció la calidad artística del grupo, y el maestro Ramón Rodríguez, director del Teatro Nacional, quien subrayó su legado docente e investigativo.
A sus 40 años, el Ballet Quetzalnáhuatl reafirma su compromiso con el futuro cultural del país. “Seguiremos enseñando con amor a las nuevas generaciones”, concluyó su director.
Quetzalnáhuatl no solo es danza: es identidad, es corazón nicaragüense en movimiento.
Esta entrada fue modificada por última vez el 11 de mayo de 2025 a las 7:22 PM
