BUENOS AIRES – ARGENTINA / El Estadio Monumental vivió una de sus noches más históricas este jueves 4 de septiembre de 2025, cuando Lionel Messi disputó su último partido oficial en suelo argentino. La Selección Albiceleste se impuso con autoridad 3-0 sobre Venezuela, en un encuentro que marcó el cierre de un ciclo inolvidable en las eliminatorias mundialistas.
Desde los primeros minutos, Argentina mostró dominio total del juego. La apertura del marcador llegó al minuto 39, cuando Messi definió con categoría tras una jugada colectiva iniciada por Julián Álvarez.
En el segundo tiempo, Lautaro Martínez amplió la ventaja con un cabezazo preciso, luego de un tiro libre ejecutado rápidamente por el propio capitán. El broche de oro lo puso nuevamente Messi, quien anotó su segundo tanto tras una asistencia en el área que lo dejó de cara al arco.
HUELLA IMBORRABLE
Más allá de la goleada, la noche tuvo un componente simbólico: el inicio de una transición generacional. El juvenil Franco Mastantuono, jugador del Real Madrid, debutó como titular y dejó grandes sensaciones con su madurez en el manejo del balón y precisión en los pases, confirmando que el futuro de la selección está en buenas manos.
Las estadísticas coronan la trayectoria de Messi en eliminatorias como local: 72 partidos disputados, 45 de ellos en casa, con un balance de 39 victorias, 24 goles y 14 asistencias. Cifras que consolidan al rosarino como una leyenda viva del fútbol mundial.
El Monumental despidió a su ídolo con una ovación que retumbó en cada rincón del estadio. Entre lágrimas y aplausos interminables, Messi se marchó dejando una huella imborrable, no solo como futbolista, sino como el eterno capitán que trascendió generaciones. Una noche de emociones que quedará grabada para siempre en la memoria del fútbol argentino.
Esta entrada fue modificada por última vez el 5 de septiembre de 2025 a las 9:49 AM
