En el centro de Italia aumenta el número de evacuados, persiste la secuencia sísmica y las condiciones climatológicas se tornan adversas con la proximidad del invierno y el descenso de las temperaturas.
A una semana del terremoto de 6,5 grados que devastó una extensa zona del centro de Italia, la región afectada continúa bajo el impacto del mayor sismo ocurrido en este país en los últimos 36 años.
Aumenta el número de evacuados, persiste la secuencia sísmica y las condiciones climatológicas se tornan adversas con la proximidad del invierno y el descenso de las temperaturas.
De acuerdo con la más reciente información brindada por el Departamento de Protección Civil (DPC), el número de personas desplazadas de sus hogares ascendió a más de 30 mil, de las cuales 21 mil 500 están en centros provisionales de acogida en sus territorios de origen.
Otras ocho mil 850 permanecen en instalaciones de la red hotelera en la costa Adriática y el Lago Trasimeno, mientras unas 160 son atendidas en casas de campaña en las regiones de Las Marcas y Umbria, parte de la cual está hoy en situación de alerta meteorológica naranja por el mal tiempo.
La tierra, por su parte, sigue temblando, con más de 23 mil 300 sismos de diferente magnitud desde el 24 de agosto último, de ellos 663 de 3,0 a 4,0 grados, 41 de 4,0 a 5,0 y cinco superiores a ese nivel, según el Instituto de Geofísica y Vulcanología (INGV).
Los datos aportados por el INGV señalan que tras el terremoto de 6,5 grados del 30 de octubre se produjeron más de tres mil 300 eventos de menor magnitud, aunque 20 de ellos superaron los 4,0 grados, suficientes para causar más daños en instalaciones resentidas por los movimientos anteriores.
Una esas edificaciones es el hospital de Amandola, localidad de poco más de tres mil 500 habitantes, clausurado la víspera debido a los daños estructurales severos sufridos por la secuencia sísmica.
El centro de atención médica sufrió afectaciones el 24 de agosto durante el terremoto de 6,0 grados, por lo cual fue cerrado en un 60 por ciento, aunque mantenía activos los servicios ambulatorios.
Desde entonces se realizaron acciones constructivas para restablecer otros servicios, pero el terremoto de hace una semana le provocó más daños, tras lo cual se determinó su clausura.
El Comisario Extraordinario para la Reconstrucción, Vasco Errani, quien constató el estado de la instalación junto con el jefe del Departamento de Protección Civil, Fabrizio Curcio, aseguró que de inmediato se buscarán soluciones temporales para que esa comunidad siga contando con servicios médicos adecuados.
Esta entrada fue modificada por última vez el 7 de noviembre de 2016 a las 11:14 AM