Familias Ibarra y Bustos mantienen viva la devoción mariana en Rivas y San Jorge

Foto Multinoticias / Altar de la Inmaculada Concepción de María en Rivas.

RIVAS – NICARAGUA / En el departamento de Rivas ya se respira el fervor previo al tradicional Grito a la Virgen María, una de las expresiones religiosas y culturales más arraigadas de Nicaragua.

A pocas horas del 7 de diciembre, las comunidades afinan los últimos detalles para celebrar una tradición que ha pasado de generación en generación y que continúa fortaleciendo la identidad espiritual del pueblo nicaragüense.

Entre las familias que mantienen viva esta herencia destacan los Ibarra, en el municipio de Rivas, y los Bustos, en San Jorge. Cada año, ambos hogares preparan altares, rezos y brindis tradicionales para compartir con vecinos y visitantes.

TRADICIÓN FAMILIAR

Frank Ibarra, devoto de la Virgen María, recuerda cómo esta tradición familiar se convirtió en un legado que hoy asume con profundo compromiso.

“Mi abuelita la celebró en vida más de 70 años. Cuando comenzó a sentirse enferma nos preguntó si seguiríamos la tradición. Le dijimos que sí, y nos heredó la imagen principal de la familia, la que celebramos con mucho amor, fervor y devoción cada 18 de diciembre. Es un fervor donde se desbordan los diferentes barrios de Rivas y son filones de gente, y gracias a Dios todos los años nos ha ido bien y no hay quien se vaya con las manos vacías”, expresó Ibarra.

El ambiente festivo también impulsa la economía local. Emprendedores de todo el departamento ofrecen productos artesanales elaborados especialmente para la temporada: dulces típicos, cajetas, decoraciones y artículos alusivos a la festividad mariana.

ESPÍRITU MARIANO

Con precios accesibles y amplia participación comunitaria, la temporada se convierte en una plataforma para promover el talento local y preservar la gastronomía tradicional.

A la vez, instituciones del Gobierno de Nicaragua han instalado coloridos altares en parques y espacios públicos, creando puntos de encuentro llenos de creatividad, música y tradición.

Con profundo espíritu mariano, Rivas se prepara para vivir una vez más esta celebración que une, acompaña y fortalece la fe de un pueblo. Este 7 de diciembre, la Gritería resonará en cada barrio, reafirmando la memoria colectiva y el amor a la Purísima.

Esta entrada fue modificada por última vez el 28 de noviembre de 2025 a las 8:55 AM