Según la tradición con la quema de un viejo las familias se despiden de todo lo negativo del año viejo y piden energías positivas para el nuevo año, Hector Villareyna Gaitan lleva 18 años fabricando los tradicionales muñecos de trapo que este 31 de diciembre muchas familias queman despidiendo el 2016.
En el barrio Altagracia son visibles más de 200 muñecos a base de madera, carton, algodon y papel periódico que se ofertan entre 500 y 600 córdobas.
Cada muñeco en forma de viejo simboliza el año que termina y según Villareyna son muchas las familias que lo buscan para continuar con una tradición de años.
Mariela Flores
Esta entrada fue modificada por última vez el 9 de diciembre de 2016 a las 9:59 AM