La Perla del Septentrión está de fiesta celebrando 155 años de haber sido elevada de Villa a categoría de Ciudad, con una serie de actividades culturales y recreativas y turísticas.
Fue un 14 de febrero de 1862 que marcó la vida de los habitantes de aquel pequeño poblado de clima fresco y empinadas montañas ubicado al norte del país, para entonces llamado, Villa San Pedro de Matagalpa, que en la actualidad es una gran ciudad, creciente y próspera, cuyas familias disfrutan de tiempos de progreso, paz y tranquilidad, ciudad que se desarrolla en pro de sus habitantes.
El acto central se realizó en el teatro municipal que resultó pequeño para la cantidad de pobladores participantes, en donde además de un espectáculo artístico cultural, se brindó reconocimiento a unas 25 personas notables que con sus acciones enarbolan el nombre de Matagalpa.
Luego, por la noche se realizó la fiesta popular de Parque a Parque (Del parque Darío, hacia el parque Morazán), unas 10 cuadras de recorrido en donde se ubican una variedad de tarimas con diferentes agrupaciones musicales.
En la tarima principal a eso de las 7 de la noche el alcalde municipal, compañero Sadrach Zeledón, ofreció un breve discurso destacando el rescate de esta celebración, la cual este año cumple 155 años coincidiendo con la celebración del 14 de febrero, día del amor y la amistad, refiriendo que “solo ha sido posible gracias a que Matagalpa vive tiempos de tranquilidad y seguridad es que se puede celebrar con alegría tan importante acontecimiento”.
Posteriormente, con la exclamación realizada por el edil Matagalpino Zeledón, “Que se Rompan los Fuegos” un espectáculo de fuegos artificiales adorno el cielo nocturno de la bella Perla del Septentrión, dando inicio a la fiesta popular.
Esta festividad cobra relevancia para los matagalpinos, porque convoca y une a todas las familias promoviendo la identidad cultural, las tradiciones y economía local. Se estima que solamente la actividad de cierre cada año atrae a más de 30,000 visitantes de todo el país.
Fue un 14 de febrero de 1867 que marcó la vida de los habitantes de aquel pequeño poblado de clima fresco, ubicado al norte del país, para entonces llamado, Villa de San Pedro de Matagalpa. En la actualidad es una gran ciudad, creciente y próspera, cuyas familias disfrutan de tiempos de progreso, paz y tranquilidad. Una ciudad que se desarrolla en pro de sus habitantes.
Esta festividad cobra relevancia para los matagalpences, porque convoca y une a todas las familias promoviendo la identidad cultural, las tradiciones y economía local.
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Clark Centeno – Multinoticias
Esta entrada fue modificada por última vez el 14 de febrero de 2017 a las 1:54 PM