El pueblo y autoridades de Nicaragua rinden homenaje póstumo a la memoria y acciones del Padre Miguel D’Escoto Brockman (Q.E.P.D.).
En los momentos previos a dar inicio con las honras fúnebres en la Cancillería de Nicaragua, diversas reacciones sobre su gran legado fueron vertidas en la sede de la diplomacia nicaragüense.
El Canciller de Nicaragua, Compañero Denis Moncada Colindres, señaló que el padre D’Escoto implementó la política nacida del seno de la Revolución Sandinista, en cuanto a política exterior, la defensa de la soberanía y el derecho de los pueblos de vivir en paz.
En ese orden recordó el llamado que el religioso hiciera de reconstruir las organizaciones internacionales como la ONU.
«El Padre, un sacerdote cristiano, revolucionario en todo el sentido de la palabra, en el aspecto político, en el ámbito diplomático, también en el ámbito religioso. Un hermano, un compañero que nos deja un legado importante en la lucha, en la implementación de las políticas exteriores de la Revolución», subrayó.
Moncada informó que la ceremonia que se desarrollará en la Cancillería será el reencuentro de los hermanos en la diplomacia y en la revolución, para demostrar el aprecio y rendir el honor que merece el trabajo y la vida del que fuera por un año presidente de la Organización de Naciones Unidas.
Para el diplomático nicaragüense, el Padre está presente con sus prácticas en vida y será permanentemente visible en las acciones políticas y diplomáticas nicaragüenses.
El asesor presidencial Emilio Rappaccioli, catalogó al padre como un santo, por sus acciones, siempre apagadas a sus principios religiosos. «Es un santo para nuestro país, para todos los nicaragüenses», indicó.
En ese sentido General en retiro, Óscar Mujica, Presidente Ejecutivo del Instituto Nicaragüense de Electricidad, Ine, valoró a D’Escoto como una de las figuras más recias de la historia reciente del país, representando los anhelos de paz del pueblo nicaragüense.
Al respecto, María Auxiliadora Chiong, titular del Mefcca, indicó que los servidores deben retomar la humildad, el servicio al pueblo, la solidaridad y la transparencia.
Asimismo, el dirigente del FNT, Luis Barbosa, valoró su presencia permanente en solidaridad con los pueblos que protagonizaban luchas por su autodeterminación. «Todas nuestras victorias tenemos que dedicárselas a él en el campo internacional. No podemos olvidar la gran batalla que él libró frente al imperio norteamericano desde las Naciones Unidas. Esa es una gran enseñanza para nosotros», comentó.
El Cardenal Leopoldo José Brenes, a cargo del responso junto al Padre Antonio Castro, destacó que D’Escoto fue un religioso que incidió por su gran labor social y proyectos a favor del pueblo.
Recordó que para él fue un gran regalo el haber sido distinguido con el permiso para volver a realizar homilías gracias al Papa Francisco.
«Eso es lo que él me comentaba, que le agradecía al Papa Francisco, porque siempre la cosa más hermosa para un sacerdote es celebrar la Eucaristía y en enero que yo estuve con él me decía: cuando lo vea (al Papa) dígale que le agradezco la gracia. Porque fue una gracia la que el santo padre le concedió, poder celebrar la Eucaristía», dijo el Cardenal Brenes.
Giovanni Loaisiga – Multinoticias
Esta entrada fue modificada por última vez el 9 de junio de 2017 a las 12:01 PM