Venezuela destaca respaldo internacional ante las amenazas estadounidenses

Foto Cortesía / Compañero Yván Gil, Canciller de la República Bolivariana de Venezuela ante la ONU en Nueva York, Estados Unidos de América.

CARACAS – VENEZUELA / En el seno del ALBA-TCP, el canciller Yván Gil sostuvo que dicha organización ha alzado su voz, dejó claro que no quiere una guerra y defiende a América Latina como zona de paz. Así informó teleSUR.

El ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Yván Gil, rechazó este jueves cualquier acción que amenace la estabilidad de América Latina y el Caribe, durante su intervención en la 26.ª reunión del Consejo Político de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), ocasión en que denunció la amenaza militar de EE.UU. contra Venezuela.

Gil destacó que la fortaleza de la región se encuentra en su diversidad cultural, histórica y social. “La unidad no significa uniformidad, sino el reconocimiento de nuestras diferencias como fundamento de una colaboración más sólida, afirmó.

Subrayó que la experiencia histórica de la región demuestra que la división genera vulnerabilidad, mientras que la unidad ha permitido alcanzar las victorias más significativas.

AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE ES ZONA DE PAZ

Señaló que en el marco de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) se ha defendido “con dignidad” la soberanía regional, y advirtió que ahora existe la obligación de resguardar esos logros en un contexto internacional convulso.

En ese sentido, el diplomático reafirmó que, en el actual contexto de agresiones, discursos de odio y amenazas externas, la declaración de América Latina y el Caribe como “zona de paz”, adoptada en 2014 por la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) en La Habana, cobra hoy mayor vigencia.

“No se trata de un pronunciamiento simbólico, sino de un compromiso político y un principio rector que obliga a nuestros Estados a resolver las disputas de manera pacífica, con apego al derecho internacional y mediante el diálogo”, sostuvo Gil.

Asimismo, ratificó el llamado del presidente Nicolás Maduro a privilegiar siempre la negociación y la diplomacia como mecanismos legítimos de solución de conflictos.

El Canciller enfatizó la importancia de defender la soberanía, la integridad territorial de cada nación, así como el principio de no injerencia en los asuntos internos.

“No nos cansaremos de exigir respeto al principio de la no injerencia de los asuntos internos de otros estados y reconocer el derecho de cada pueblo a decidir su propio destino como lo ha decidido el pueblo venezolano soberanamente en cada uno de sus procesos electorales”, recalcó.

Gil advirtió que los países latinoamericanos y caribeños deben permanecer vigilantes frente a intentos de desestabilización, pues un ataque a un Estado de la región afecta a toda la comunidad. En esa línea, denunció las “acciones hostiles y las amenazas públicas del Gobierno de Estados Unidos”, que buscan socavar la estabilidad de la región.

UNIDAD REGIONAL EN NUESTRAMÉRICA

El funcionario venezolano también llamó a redoblar esfuerzos en favor del desarme nuclear y a proyectar a América Latina y el Caribe como un referente global de seguridad humana. “Nuestra región puede y debe erigirse como un faro de cordura, un espacio donde la paz sea la norma y no la excepción, subrayó.

El diplomático destacó que América Latina y el Caribe deben preservar su carácter de territorio de paz, diálogo y cooperación, y que la unidad regional debe convertirse en un muro frente al racismo y al supremacismo. “Nuestra proclama de paz debe ser el legado más valioso que dejemos a las próximas generaciones, expresó.

El Canciller venezolano valoró el papel que ha desempeñado el ALBA-TCP como voz unificada de los pueblos latinoamericanos y caribeños, marcando el camino hacia la soberanía, la paz y la verdad.

“Hoy, nos hemos convertido y tenemos la responsabilidad de ser la punta de lanza en una acción que detenga la locura que se pretende imponer en nuestros pueblos”, aseguró.

Además, denunció a las élites que han vivido históricamente de la guerra, la coacción y la invasión a los pueblos, y que hoy buscan normalizar estas prácticas en América Latina. “Pretenden que nuestros pueblos tomen decisiones con una pistola en la cabeza para favorecer intereses internos de Estados Unidos, alertó.

Finalmente, instó a los Estados miembros a asumir la responsabilidad histórica de guiar al bloque como una organización soberana y libre, comprometida con la defensa conjunta de la región frente al supremacismo y al fascismo que pretende instalarse en nuestra región.

Esta entrada fue modificada por última vez el 25 de septiembre de 2025 a las 9:54 AM