Los candidatos a las elecciones generales del domingo en España cierran hoy sus respectivas campañas, tras dos semanas de intensa actividad en la que intentaron captar el voto de un electorado decidido a revertir décadas de bipartidismo.
El presidente del Gobierno y candidato a la reelección por el conservador Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, y el secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, realizarán en Madrid sus últimos actos proselitistas.
Además del PP y el PSOE, las dos formaciones que encarnan el bipartidismo desde 1978, los líderes de Izquierda Unida-Unidad Popular, Alberto Garzón, y de Ciudadanos (centroderecha), Albert Rivera, también escogieron la capital española como cierre de campaña.
La agrupación de centroizquierda Podemos, que junto a Ciudadanos (C’s) modificó el panorama político en este país europeo en los últimos dos años, es la única que clausurará su carrera electoral fuera de Madrid.
Su máximo dirigente, el joven profesor universitario Pablo Iglesias, eligió Valencia para poner broche final a su campaña.
De cara a los comicios del domingo, el PP se mantiene como la formación más votada y el PSOE sería segundo frente a un auge de Podemos y un estancamiento o declive de Ciudadanos, según sondeos publicados el pasado lunes por los diarios El País y El Periódico.
Pese a que los populares suben frente a anteriores encuestas hasta algo más del 25 por ciento de los votos, no tendrían mayoría para gobernar ni siquiera con el apoyo del partido de Rivera, considerado su aliado natural.
Ambos estudios, divulgados el último día que la ley permite hacerlo antes de la cita con las urnas, vaticinan un declive de C’s, y mientras El País lo sitúa como cuarta fuerza política tras Podemos, El Periódico lo coloca tercero pero prácticamente empatado con la formación de Iglesias.
Para la mayoría de analistas, los españoles castigarán el domingo a sus partidos tradicionales después de casi una década de crisis económica, desempleo galopante y profundas desigualdades sociales, provocadas por duros recortes en el gasto público.
Los expertos atribuyen esta desigualdad a la pérdida de empleos, las medidas de austeridad y los bajos salarios, mientras que los impuestos para los más adinerados bajaron en los últimos dos años.
En ese lapso, Podemos y Ciudadanos irrumpieron en el escenario decididos a quebrar la alternancia en el poder del PP y el PSOE y cambiar las reglas de juego.
Esta entrada fue modificada por última vez el 18 de diciembre de 2015 a las 10:34 AM