La Compañera Rosario Murillo, Vicepresidente de República, exhortó a los nicaragüenses clamar a Dios para llenarnos de paciencia y prudencia y así consolidar la paz, ante la campaña infame que desarrollada grupos que mendigan castigo para Nicaragua.
Dijo que Nicaragua se liberó de todo lo que representó agresión, crímenes y sangre, impuesta por estos grupos terroristas, pero que ahora se reúne en el bien común, en fraternidad y hermandad.
Señaló que hay clamar a Dios por la paz y la justicia, y en este Septiembre Victorioso consolidar la paz, la tranquilidad y el derecho de convivir en armonía.
Agregó que estos grupos personas que desarrollan la campaña infame y realizan escándalos, deberían de reflexionar, porque con las mentiras y las calumnias no van a ningún lado, y que Dios les enseñe su equivocación, porque el padre de las mentiras es el diablo que actúa para dividir a las familias.
Indicó que los nicaragüenses debemos esperar en Dios y tener mucha paciencia y prudencia ante “esas calumnias e infamias de esos pocos que pretenden que desde afuera, que se expresan sobre Nicaragua, porque esos pocos piensan como extranjero, que sepan que la victoria es la dignidad y la resurrección”.
La Compañera Rosario señaló que con ese silencio prudente y con la oración ferviente se logrará eliminar las pretensiones de estos grupos que quieren dividirnos, pero no pasarán, porque el amor es más fuerte que el odio.
Agregó que el amor lo transforma todo, y esos puchitos que todavía configuran sus oraciones con desprecio a las mayorías, deben entender que la potencia del amor debe transformarlos y va a obrar milagros y prodigios.
Apuntó que los nicaragüenses estamos para aprender a convivir, a compartir, a ser solidario, a ser generoso, a olvidar, porque el egoísmo es pecado capital, y tienen que ver más allá que los propios pies y pensar con el corazón, como nicaragüenses, como hijos de estar tierra.
Indicó que tenemos que impulsar procesos de reconciliación, aunque es difícil para las personas que ha perdidos seres queridos, porque sienten dolidos, pero hay que trabajar juntos para que Nicaragua logre el reencuentro, trabajo y paz.
“Las fuerzas del amor es transformadora y vence cualquier obstáculos, y el amor en grande se mostrará otra vez ante el mundo de lo que somos capaces”, señaló.
Dijo que el deseo de paz es el sentimiento que embarga a las mayorías, porque es necesario alcanzar caminos a la reconciliación, y debemos llenarnos de perdón y capacidad de amar, porque Nicaragua tiene que salir adelante.
“Aquellos que todavía no saben identificar el amor, que Dios les ayude en ese necesario proceso del renacimiento de un corazón sensible, porque el amor no es solo para uno mismo, sino al contrario, al servicio de los demás”.
Lester Juárez – Multinoticias
Esta entrada fue modificada por última vez el 26 de septiembre de 2022 a las 11:49 AM
