Medardo Mairena era el que daba las órdenes en los tranques de la muerte

Medardo Mairena era el que daba las órdenes en los tranques de la muerte

Durante la tercera sesión del juicio que se sigue contra Medardo Mairena Sequeira, Pedro Joaquín Mena Amador y otros dos acusados, un agente policial encubierto que estuvo por casi tres meses en los diferentes tranques ubicados en Chontales y Río San Juan, logró determinar que el primero de los procesados era el que ordenaba la ejecución de los delitos, para obligar al gobierno a ceder ante las demandas de los grupos golpistas que estaban sentados en la mesa de diálogo.

Medardo Mairena era el que daba las órdenes en los tranques de la muerte

El agente policial identificado como Código Uno, estuvo de incógnito desde el 25 de abril hasta el 13 de julio, periodo de tiempo en que pudo ser testigo de muchos hechos ilícitos que cometieron en los tranques de Juigalpa, Lóvago, Acoyapa y Morrito.

El agente reveló que Medardo Mairena era el líder principal de los tranques; Pedro Joaquín Mena era el tesorero de la organización y Freddy Alberto Navas dispuso de sus cuentas bancarias para recibir dinero del extranjero para financiarlos.

Mairena junto a sus compinches cada vez que llegaba al empalme de Lóvago, se reunía en una escuelita pública cerca del lugar, junto a Mena, Navas y jefes de tranques, a quienes orientaba incrementar las acciones delictivas para presionar al gobierno a ceder.

Entre las acciones que ordenaba Mairena, estaban los secuestros de funcionarios del gobierno, incluyendo efectivos policiales o del ejército. También orientaba no dejar pasar ambulancias.

“En los tranques se cobraba, para dejar pasar a los vehículos o camiones, se cobraba entre 150 y 600 córdobas. Medardo Mairena se presentó el 10 de julio a reunirse con los jefes de tranques y orientó no dejar pasar ambulancias, porque se debía ejercer mayor presión porque en Managua se estaban quitando los tranques y eso no podía pasar en Lóvago”, dijo el Código Uno.

Mairena se vistió de sacerdote

Determinó que en los tranques solo estaban permitidos pasar camionetas, camiones o vehículos taxi que presentaban una tarjeta de “vía libre” que el movimiento anticanal había diseñado.

Ese 10 de julio Mairena junto a sus cómplices después de reunirse con los jefes de tranques, se dirigió hacia el municipio de El Almendro donde llegó vestido de sacerdote para dirigirse a la población y llamarla a que se sumarán a la “lucha contra el gobierno”.

El crimen de Morrito

El 12 de julio, día que mueren asesinados cuatro agentes policiales y un docente, el agente encubierto estaba en el empalme de Morrito y recibió la información de que iban atacar la delegación policial.

“Me cayó la información a mi teléfono que me estaba diciendo que en el tranque de Morrito estaban deteniendo a los vehículos que estaban sirviendo de taxi para trasladar gente con una supuesta marcha, pero la información era que iban atacar la delegación de Morrito, quise informar a mis colaboradores que tenía en Morrito, pero debido a las circunstancias que me encontraban rodeados de ciudadanos que estaban en el tranque y estaba en peligro mi vida, no pude comunicarme hasta el momento de los hechos y el responsable directo es Medardo Mairena porque se presentó y orientó ir (atacar) con todo”, expresó Código Uno.

Asesinato de Emmanuel Tiffer

También señaló que Medardo Mairena y Francisca Ramírez, fueron los autores intelectuales del ataque a la delegación del INSS en Nueva Guinea el 20 de abril.

El agente policial encubierto también conoció de las circunstancias en que fue asesinado el delincuente Emmanuel Tiffer, quien llegó al tranque de San Pedro de Lóvago, luego de haber huido de la UPOLI, tras tener diferencias con Josué Mendoza, alias “Viper”.

Tiffer llegó al tranque armado con un fusil AK, pero al pasar de los días tuvo diferencias con otros grupos delincuenciales denominados “Los Churros de Humo” y “Los Batuzos”. El autor material del asesinato es un sujeto identificado como “Chepito”, quién prácticamente cazó a su víctima cuando ésta corría por salvar su vida.

Una vez muerto Tiffer, su cadáver fue colocado en un camión cargado de queso. La orientación era que el cadáver de Tiffer fuese tirado en algún lugar de Managua, con la intención de culpar a la Policía y por ende al Gobierno Sandinista.

En este proceso continúan declarando lo testigos de cargo del Ministerio Público, entre ellos los agentes policiales que fueron secuestrados el 12 de julio en la delegación de Morrito y fueron llevados hasta el tranque de San Pedro de Lóvago, donde fueron ultrajados y torturados.

La primera en declarar fue la suboficial Yorleni Ávalos, quién hizo un relato desgarrador de cómo vio caer asesinados a sus compañeros de trabajo esa tarde de julio, cuando los delincuentes comandados por Medardo llegaron a atacarlos.

Fuente: El 19 Digital

Esta entrada fue modificada por última vez el 26 de septiembre de 2022 a las 8:33 AM