Una Nicaragua que avanza en Revolución: Hay un hilo conductor entre Sandino, Carlos y Daniel

Una Nicaragua que avanza en Revolución: Hay un hilo conductor entre Sandino, Carlos y Daniel

A 42 años del tránsito a la inmortalidad del Comandante Carlos Fonseca Amador, heredero de Sandino, sus principios, valores y proyecto histórico se reproduce en proyectos, pero principalmente en la gestión de gobierno amorosa y dedicada al pueblo, encarnada en el Comandante Daniel Ortega Saavedra.

Una Nicaragua que avanza en Revolución: Hay un hilo conductor entre Sandino, Carlos y Daniel

El Comandante Lumberto Campbell, recuerda haber conocido a Carlos a finales de 1975, en una casa de seguridad en carretera sur, donde junto a otras compañeras revolucionarias lo acompañó hasta que el principal líder del FSLN partió a la montaña.

Lo recuerda como un hombre serio y estudioso, pendiente siempre del avance del proceso revolucionario.

“Como yo trabajaba, daba clases en la universidad. Cada tarde que yo regresaba era un interrogatorio, sobre la universidad ¿No?, sobre cómo estaba el movimiento estudiantil, cómo estaban los estudiantes en general, percibiendo la lucha, cómo estaba el FER, cómo estaba en CUUN y preguntaba sobre algunos profesores, cómo estaba su integración, qué opinaban… Un compañero muy acucioso, muy acucioso”, comenta.

También en sus recuerdos está muy presente aún una ocasión en la que no abandonó su cuarto durante tres días, mientras devoraba libro tras libro, casi sin pausas para comer.

Afirma que sus estudios y su pensamiento está recogido en el programa histórico del FSLN y precisamente Campbell refiere que el cariño especial que compartió con el Comandante Carlos por el amor y el interés a los cambios necesarios para la Costa Caribe.

“Y él me decía que la situación de injusticia, y la pobreza que vivíamos en Nicaragua en general, pero particularmente en la Costa Caribe nicaragüense era una cuestión inadmisible y eso tenía que cambiar. Incluso hay un capítulo especial en el programa del Frente Sandinista dedicado a la Costa Caribe nicaragüense”, afirma.
Refiere que su pensamiento aún los mantiene motivados e inyectados de esa fe y esperanza en más acciones concretas que se vienen desarrollando. “Yo lo veo en las cuestiones concretas que hemos venido haciendo”.

“Carlos recoge a Sandino y el Comandante Daniel Ortega recoge a Carlos. Hay un hilo conductor ahí, Sandino, Carlos y Daniel. Yo creo que se viene implementando en la práctica lo que está recogido en ese programa histórico. Si yo veo un lugar, donde uno puede ver, además de toda Nicaragua, la Costa Caribe ver cómo el Comandante (Daniel) viene empujando programas en la Costa que nunca eran antes… insondables. Solo gracias a una revolución y una conducción en la línea que fue trazada por Carlos, han sido posibles los logros que hoy tenemos en Nicaragua y en la Costa Caribe en particular”, asegura.

Lealtad y fe
Considera que la lealtad, la fe y la confianza son valores fundamentales para alcanzar los éxitos. Son los mismos valores predicados, pero también practicados por Carlos Fonseca.
Recordó un momento del Comandante Tomás Borge, quien era el único de quienes habitaban la casa de seguridad, que conocía su ubicación.

“Uno busca que reubicar a las personas, máxime que estamos hablando del máximo dirigente del Frente Sandinista, Carlos Fonseca. Obviamente mi primer instinto fue buscar como contactar a otras casas que teníamos y que la gente conoce, para buscar cómo sacarlo de ahí. Y para reflejo del concepto de lealtad y confianza que tenía el Comandante Fonseca en el Comandante Borge, me dice: Que no se mueva nadie, que Tomás, aunque lo torturen no habla”, recuerda.

Esas palabras sellaron al Comandante costeño para siempre en su vida. “Los años 70 eran años muy duros, a como hoy, son años muy duros y hoy más que nunca esa fe, esa lealtad, esa certeza de que los objetivos los vamos alcanzando, con mucho esfuerzo, con mucho trabajo, con mucha seguridad. Yo creo que hoy más que nunca está expresado”, afirmó.

Al respecto señaló que este proceso avanza, “hacia el sol de la libertad”, a pesar de que existan personas que llegan vacilantes hasta cierto punto, otros cobardes y traidores incluso, malos hijos nicaragüenses, pero la mayoría de habitantes en éste país son personas dispuestas a dar lo mejor para la construcción de una Nicaragua más próspera, digna, soberana e independiente.

“Yo creo que los judas siempre los hay, pero, aún estando Judas ahí en el mundo, ahí estuvo también un Cristo”, reflexionó.

Recordó que el mismo enemigo contra el que lucharon Carlos y los mártires de la revolución, es el mismo con el que se enfrena el país y fue del terror vivido durante el intento de Golpe de Estado.

“Si hay alguien que estuvo muy sereno con mucha confianza y certeza en este pueblo, se llama Comandante Daniel Ortega Saavedra y lo digo con todas las letras. Recuerde que cuando éstos bárbaros atacaban a las Alcaldías, atacaban, mataban compañeros, había muchos sandinistas a lo largo y ancho del país, prácticamente urgiendo una reacción de cara a ese fenómeno, pero el Comandante siempre fue sereno, dando los pasos necesarios para llevar esto por la ruta que sea menos costosa posible, asegurando el éxito “, destacó.

Para el comandante Lumberto Campbell el reto ahora es seguir construyendo una Nicaragua cada vez más inclusiva, más justa y en la que los jóvenes y niños puedan seguir aspirando al arte, la cultura y la belleza. “Hay que ir generando puestos de trabajo, porque nuestro adversario, el enemigo principal nuestro ahorita es el desempleo”.

Carlos Regresando de Rusia
El Comandante Lenin Cerna, escarba en su memoria y el primer recuerdo que encuentra es el de Carlos Regresando de Rusia.

Cerna explica que su padre, un comunista exiliado, Zapatero salvadoreño, frecuentemente visitado por Rigoberto López Pérez y otros luchadores socialistas y comunistas.
Entre vendedores de periódico y activistas elementales de ideas políticas avanzadas, apareció Carlos con su libro, “Un nicaragüense en Moscú”, recién llegado de la Unión Soviética.

En ese taller le fueron comprados tres libros, pero el da mayor valor fue aquel cuya dedicatoria era: “De la tierra de Lenin, Unión Soviética, para Lenin de Nicaragua”, en puño y letra del fundador del FSLN, a petición del padre de Cerna.

“Para una persona ya a la altura de la vida que uno tiene, que ha caminado tanto, que ha ganado tanto y perdido tanto, esa es… una de las cosas que más lamento es no contar con el libro”, refiere aún perdido entre sus recuerdos.

No fue sino a finales de 1987, al regreso de Carlos y Tomás de Pancasán. En esos años Carlos ya había dejado de ser un hombre y personificaba al mito.

“Ya era un símbolo, un ejemplo y ya era un mito. Ya hablaban como se habla de todas esas figuras conocidas, perseguidas, se hablaba de él vestido de campesino, vestido de carretonero. Y era difícil porque él era un hombre que no pasaba desapercibido”, recuerda admirado de cómo había burlado los radares de la dictadura.

La humildad
Afirmó que las cualidades de éste hombre inmortal son casi incontables. Su humildad sin embargo era abrumadora.

“El ejemplo de lo que tenía que hacer en su actitud cotidiana. Nunca comía primero que los demás compañeros, nunca buscaba el mejor lugar. Nunca estuvo preocupado por tener la mejor arma o cualquier otro tipo de cosas que lo colocara distinto a los demás”, fue de las enseñanzas que dijo haber experimentado, sin él haberle transmitido una palabra.

En éstos tiempos complejos, las ideas de Carlos han nutrido al sandinismo, pero existe aún la necesidad de profundizar en su pensamiento.
Según Cerna esa es precisamente la diferencia entre el militante sandinista y el opositor contrarrevolucionario.

“Nosotros somos ceiba, ellos son matas de vida efímera. Son cepas que no se sostienen en la superficie, buscan nuestras raíces y se encocan porque en ésta historia, o se es o no se es”, aseguró.

Respecto a los que gozaron del calor humano y hoy no recuerdan sus orígenes recordó: “El que reniega de sus raíces es como el que reniega de su sombra. El que no tiene sombra, no existe.”
Cerna augura para Nicaragua una ruta de avance aún a pesar de las dificultades.

“No podrán echar para atrás todo lo que hicimos. No podrán. Avanzaremos con dificultades, pero como decía un compañero: Nosotros nacimos para las dificultades, los revolucionarios nacen en las dificultades y se imponen a las dificultades. Nicaragua saldrá adelante a pesar de todos los que no sienten a Nicaragua como la sentimos nosotros”, refirió.

Fuente: El 19 Digital

Esta entrada fue modificada por última vez el 26 de septiembre de 2022 a las 8:47 AM