Desde hace muchos años doña Guadalupe Ballestero junto a su familia, salen en peregrinación desde la comunidad de los Remedios hacia la orilla del rio de Quezalguaque, lugar donde fue encontrada la imagen de la Virgen de los Remedios hace más de 300 años.
“Es una Devoción que tengo con toda mi familia desde hace mucho tiempo, yo salía con mis padres y voy mantener esta tradición porque ella ha intercedido por todas mis curaciones; pensé que hoy no vendría pero la Virgencita de los Remedios me dio fuerza para estar aquí”, manifestó doña Guadalupe Ballestero.
La réplica de la virgen de Los Remedios recorre las comunidades para finalizar en la tradicional bendición del agua del pocito, espacio religioso donde la feligresía católica llega para obtener el agua bendita y poder llevarla hasta sus hogares.
El 16 de febrero la imagen y su feligresía bajan al nicho donde fue encontrada para bendecir el agua en el pocito, ubicado a la orilla del río Quezalguaque.
Doña Luz Palma, participa todos los años y viaja desde la comunidad Indígena de Sutiava para venerar la imagen.
“Siempre vengo con mis amistades y familia porque es una tradición desde hace muchos años, además la virgen viene a bendecir el pocito de su aparición y puedo llevar agua bendita a mi casa y poder seguir curando mis dolencia, no solo del cuerpo sino espirituales principalmente, señaló Doña Luz.
Esta tradición atrae a cientos de feligreses devotos de distintos puntos del país y países de Centroamérica.
Henry Sandoval
Corresponsal Multinoticias – Quezalguaque
Esta entrada fue modificada por última vez el 16 de febrero de 2017 a las 10:47 AM